Cruzaron la orilla sin que las pirañas les atacaran pero al bajar de la canoa les esperaba un enooooorme oso gris a la entrada del laberinto del bosque. Rugía como mil leones y ellos pensaron que se los iba a comer porque llevaba los dientes llenos de sangre. Entonces Natalia le tiró su bocata de la merienda y, mientras el oso se lo comía salieron pitando.
En el camino encontraron un obstáculo, una gran roca electrificada y no podían seguir. Pensando qué hacer vieron venir al oso corriendo y rugiendo detrás de ellos, entonces se apartaron y el oso derribó la roca y se electrocutó. Entonces apareció el mago.
Habían conseguido superar la gran prueba: matar al oso horroroso, y el premio era una mina entera de chocolate para ellos.
Y colorín colorado este
cuento se ha acabado.
Autores de este artículo: Ángela Chirivella, Carla Bertolucci, Kike GarcíaIlustración: Nacho Sena
Curso: 1º
Centro: ESCUELA 2
Localidad: La Cañada
Provincia: Valencia
País: ESPAÑA
Tutora: Sara Cervellera
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